Una vez estuve perdido ..bueno más de una vez. Tenía apenas 19 años y entonces era un posible final en mi vida. Me pasé largos meses en una pecera de cristal. Allí escribía y oia la radio cada día , una gran SSSSSS. El sonido envolvente podia posponer lo que cada día sentía, dolia, perdia, olvidaba, …

Entonces estaba Dios . Un Dios que te obliga a no tener miedo a la muerte. Me juré que si salía de ese lugar amaría a Dios por encima de todo.

Y luego cuando ya todo paso me olvidé de él , una y otra vez. Mi etapa por el discurso de Dios , por el encuentro con Dios , de traje y austeridad extrema . Y así como si fuera algo ajeno a mi apareció en forma de parabola, en forma de catecismo, en forma de texto, de hermenèutica , de discurso, de diálogo … allà en Sinera entre capuchas y incienso.

Perdido y abandonado nuevamente como si la razón de la  creencia no fuese más alejada que la experiencia extrema que había tenido .Eso de la fe claro que tiene un precio, el precio de el dogma , la ortodoxia, la construcción de ..

En todo abandono hay dos cosas importantes : un abandonado y un abandonador . Quien un día te dejó y quien tu un día dejastes . Hay olvido por lo tanto, expreso, tácito . Dios ya no está donde debe estar. Recuperarlo es un ejercicio de impostura intelectual, y deconstruir el esquema de lo aprendido para abandonarlo todo y volver a empezar. Eso, alejarse de ella , de la que un día cogió sus botas y marchó en tren , es dejar atrás el pasado, y con eso , el mundo anterior , el que nunca fué más que un espacio para aprender de tantos abandonos anteriores , de tus abandonos , de sus abandonos, de sus despidos, de sus adioses.. y que más da si eso debe ser así.

Dios , de nuevo recuperado está . En una madre con un bebe que te lo abandona en tus brazos , en un hombre que te sonrie al pasar la madrugada fría y negra, …  Dios está en la meditación de cada día, en tus shiné , en tus velas encendidas, en tu dolor de todo y de nada, de vida y de existencia..  A Dios lo escucho en «Dios sin Dios» , en la palabrea de Josep en su lucharse contra todo y contra nada, Eso es abandono , eso es pérdida , porque Dios es gratuito pero no supérfulo , Dios es todo menos nada,